4º
Confía, se tú mismo, no cambies.
Fueron las frases que siempre le decían.
Las llevó presentes cada día.
Y murió desangrando por mordiscos y puñaladas.
De los desconfiados, de los falsos y en general
De los que ya no eran lo que habían sido.
Por los que habían cambiado
Para ser bestias devoradoras de los humanos.
5
No tengo que decir nada.
No debo hacer nada.
No tengo que protestar por nada.
No debo sentir nada.
No tengo que dejarme llevar por nada.
No debo revolucionarme por nada.
No tengo, ni debo nada.
Nada, la nada.
6
Los errores, los fallos, las malas decisiones ……. Transforman.
Capea